Queridos Plebes:
Lamento darles la catastrófica
noticia, de que este año no me será posible bajar del inframundo hacia la
tierra con ustedes. Aquí, les platico mis razones:
Desde que existe Facebook,
millones de niños se han convertido en códigos binarios y fotos de perfil.
Motivo por el cual, he recibido múltiples quejas de sus padres a mi telégrafo. Explican
que ya no creen ni en elefantes, menos en navidad ni en mí.
Otro motivo, es que mis renos
están podridos en tristeza y enfermos de adultez. Desde que abandonaron su infancia
y juventud ya no les restan fuerzas para dejarse caer al mundo.
Otro motivo no menos importante,
es que la máquina refina juguetes ha dejado de funcionar desde que las sonrisas
de los niños, mis renos y todo mi hogar han cesado. Esto, porque el botón de
encendido sólo adquiría energía eléctrica de esa forma.
Por otro lado, he envejecido mis
adorados plebes. He envejecido y esto me causa un dolor que fragmenta mis
células en huecos. Ayer, descubrí una cana nueva entre tantas. También descubrí
que mi uniforme no me queda porque perdí mi imaginación. Sí, he envejecido y me
pesan los pasos.
También quiero platicarles que me
volví adicto a la poesía, a vivir la poesía. Situación que me inyectó delirio a
viajar pero no a cruzar chimeneas. La verdad, adquirí el hábito de robarme los
libros de sus casas. Mismos que devolveré en cuanto finalice de leerlos.
Mis hermosos hipocampos, es una
gran tristeza de veras no poder brindarles obsequios como cada año. Espero que
reciban todo el amor y cariño de sus padres para que no los necesiten. Solicitaré
todo el año para reparar mi casa de juguetes y creer en mí., mientras, ustedes
sigan retumbando en sus centros la tierra
con su felicidad.
Les dejé con doña Luna un par de
lucecitas y, por supuesto, algunos videos en You Tube donde podrán celebrar con
mis películas y videos caseros. Sin más por el momento, les deja un caramelo y
un abrazo:
P.D. Si quieren visitarme, no
olviden pedir a sus papás el cohete y su traje de astronautas.